La Organización de los Estados Americanos recibió con beneplácito un acuerdo entre El Salvador y Honduras, para poner fin formalmente a una querella fronteriza entre ambas naciones centroamericanas.
El secretario general adjunto de la OEA, Albert Ramdin, dijo, el miércoles, en una declaración, que el acuerdo es una expresión importante del compromiso de los dos países para fortalecer y extender los lazos entre sus ciudadanos.
Ramdin estuvo presente, el martes, cuando el presidente hondureño Manuel Zelaya y su homólogo de El Salvador, Elías Antonio Saca, se dieron cita en la población fronteriza de El Poy, para ratificar su frontera de 375 kilómetros.
La frontera había estado en disputa desde un breve, pero sangriento golpe en 1969, el cual se derivó en parte del resentimiento hondureño por los migrantes salvadoreños.
Aunque un acuerdo de paz fue firmado en 1980, el caso fue ante la Corte Internacional de Justicia, que en 1992 estableció una frontera que otorga a Honduras el 69% del territorio disputado.