El senado estadounidense vota este viernes sobre la extensión de controversiales artículos de la ley antiterrorismo conocida como la Ley Patriota.
Aprobada después de los ataques del 11 de septiembre de 2001, la Ley aumenta la autoridad del gobierno federal para investigar y vigilar a los ciudadanos.
La Casa Blanca e importantes legisladores estadounidenses alcanzaron un acuerdo sobre una legislación para prohibir todas las formas de tortura contra las personas bajo custodia de Estados Unidos.
La cámara de representantes votó el miércoles a favor de una versión combinada de las dos cámaras, la cual modificaría y renovaría la mayoría de las cláusulas de la legislación por otros cuatro años.
Sin embargo, varios demócratas y republicanos del senado dicen que la medida de compromiso da al gobierno demasiado acceso a la información privada de los ciudadanos, y algunos oponentes amenazaron con tratar de evitar que la ley sea llevada a votación.
El presidente Bush pidió a los senadores que aprueben la medida, indicando que es necesaria para la seguridad del país.
Un vocero presidencial dijo este viernes que los legisladores que han expresado preocupación por los alcances de la ley, están poniendo “la política por encima de la seguridad del pueblo estadounidense”.