Funcionarios de Pakistán dijeron que ningún militante extranjero presuntamente escondido cerca de la frontera de Afganistán se entregó antes del plazo de este viernes.
Pakistán le había otorgado plazo hasta hoy a combatientes vinculados a al-Qaida y el Talibán para rendirse y entregar sus armas. A cambio, recibirían garantías de que no serían entregados a otro país.
Funcionarios advirtieron que los militantes enfrentarían acciones militares si no se entregaban, pero se informó que el gobierno todavía prefiere llegar a una solución política.
El plazo ocurre una semana después de que Pakistán le diera amnistía a cinco integrantes de tribus, pese a que fueron acusados de albergar fugitivos de al-Kaida en la región del sur de Waziristán.