Personas enfermas de gripe, o influenza han inundado los servicios de emergencia en Estados Unidos, creando largas colas en las salas de espera mientras los frustrados médicos solo pueden hacer poco más que tratar los síntomas de la enfermedad.
Algunos pacientes llegan a las salas de emergencia porque no tienen un médico de cabecera y otros asustados por los informes de prensa sobre casos generalizados de la enfermedad en 24 estados.
En el estado de Maryland, en el área metropolitana de Washington, personas con síntomas de gripe inundaron las salas de emergencia al punto que las ambulancias tuvieron que ser desviadas a diferentes hospitales, no necesariamente más cercanos.
Los Departamentos de Salud en todo Estados Unidos tratan de obtener vacunas contra la gripe.
El gobierno estima que unos 92 niños menores de cinco años mueren anualmente debido a la gripe.
En lo que va de este año, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, con sede en Atlanta, han informado que más de 30 niños han muerto en todo el país debido a la gripe.