El ejército de Estados Unidos dio a conocer que ocho civiles, entre ellos seis niños, perecieron el viernes pasado en un asalto contra una presunta base terrorista en el este de Afganistán.
El incidente, que no había sido reportado, fue uno de dos en que infantes murieron durante operaciones militares llevadas a cabo la semana anterior contra supuestos miembros del movimiento Talibán y la red terrorista al Kaida.
Un vocero militar estadounidense declaró que soldados descubrieron los cadáveres de los menores y dos adultos hasta el sábado después de asalto ocurrido la noche anterior en un complejo de residencias cerca de la ciudad de Gardez.
Funcionarios del Deprtamento de Defensa estadounidense expresaron pesar por un incidente separado ocurrido el sábado, en el que nueve niños afganos murieron en un bombardeo dirigido a presuntos insurgentes.