Dos pilotos estadounidenses que accidentalmente dispararon contra soldados canadienses en Afganistán el año pasado, dando muerte a cuatro uniformados, no serán sometidos a acusaciones criminales.
Informes de prensa indican que la Fuerza Aérea no planea someter a los oficiales mayor Harry Schmidt y mayor William Umbach a un castigo judicial ni tampoco a una corte marcial.
Los oficiales enfrentaban cargos de homicidio no premeditado y otras ofensas que los podrían haber enviado a prisión por 64 años.
Para ese jueves se espera un anuncio oficial respecto a que las acusaciones han sido dejadas sin efecto.
Los cargos derivan de un ejercicio de entrenamiento nocturno con armas de fuego, efectuado cerca de Kandahar, en que los pilotos confundieron a miembros de la Infantería Canadiense con fuerzas enemigas.